Magnesio: tipos y propiedades
Propiedades y beneficios del magnesio
El magnesio es un mineral esencial para nuestro organismo, ya que desempeña un papel clave en numerosas funciones corporales:
Regulación del sistema nervioso y muscular: El magnesio juega un papel fundamental en la transmisión de los impulsos nerviosos y en la contracción y relajación de los músculos. Ayuda a mantener un sistema nervioso saludable y a prevenir calambres y espasmos musculares.
Fortalecimiento de los huesos: El magnesio es necesario para la absorción y metabolismo del calcio, otro mineral esencial para la salud ósea. Una ingesta adecuada de magnesio contribuye a fortalecer los huesos y prevenir enfermedades como la osteoporosis.
Regulación del ritmo cardíaco: El magnesio desempeña un papel importante en la regulación del ritmo cardíaco. Ayuda a mantener un ritmo cardíaco regular y previene arritmias y otros problemas cardiovasculares.
Obtención de magnesio a través de la alimentación
El magnesio se encuentra presente en diversos alimentos, por lo que es posible obtenerlo a través de una dieta equilibrada. Algunas fuentes de magnesio son:
Almendras y nueces
Espinacas y otras verduras de hoja verde
Legumbres
Cereales integrales
Chocolate negro
Plátanos
Es importante incluir estos alimentos en nuestra alimentación diaria para asegurar una ingesta adecuada de magnesio.
Suplementación
Existen ciertas situaciones en las que puede ser necesario o recomendable recurrir a la suplementación de magnesio:
Deficiencia de magnesio diagnosticada.
Embarazo y lactancia, ya que las necesidades de magnesio aumentan durante estas etapas.
Práctica intensa de ejercicio físico, ya que se pierde magnesio a través del sudor.
Estrés crónico, ya que el estrés puede agotar los niveles de magnesio en el cuerpo.
Clases de magnesio y sus beneficios
Existen diferentes formas de magnesio que se utilizan como suplementos. Algunas de las más comunes y beneficiosas para mejorar sus niveles en nuestro organismo son:
Magnesio quelado: que se absorbe fácilmente, ya que en este formato el mineral se encuentra unido a un aminoácido, siendo además, menos propenso a causar efectos laxantes.
Magnesio citrato: en esta fórmula, el mineral va unido a un ácido cítrico, promoviendo así una alta biodisponibilidad y haciéndolo beneficioso para el sistema digestivo.
Magnesio glicinato: unido a la glicina, el resultado es suave para el estómago y además, tiene propiedades relajantes.
Pero si lo que queremos es optimizar sus propiedades en nuestra salud cardiovascular y cerebral, los formatos específicos para ello son:
Acetil taurato de magnesio o Treonato de magnesio, en los que se le añaden, a los beneficios propios del magnesio, las propiedades de la taurina o el ácido L-Treonato.
Cada forma de magnesio tiene sus características y beneficios propios, por lo que es importante elegir la más adecuada según tus necesidades y tolerancia.
Consulta siempre con un profesional de la salud para determinar si necesitas suplementar tu ingesta de magnesio y qué forma es la más adecuada para ti.