Alimentos que reducen el estrés

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El estrés crónico y su impacto en nuestra salud

El estrés es una respuesta natural del cuerpo ante situaciones desafiantes o amenazantes. Sin embargo, cuando los niveles de estrés elevados se mantienen en el tiempo, éste se vuelve crónico y es cuando perjudica tanto  nuestra salud física como mental.

El estrés crónico afecta nuestro sistema inmunológico, aumentando el riesgo de resfriados, gripes e infecciones. Favorece el desarrollo de enfermedades crónicas como la hipertensión, la diabetes y las enfermedades cardíacas y también afecta nuestra salud mental, fomentando trastornos del sueño, así como la depresión o ansiedad.  

La relación entre el estrés y la alimentación

Algunos estudios sugieren que ciertos alimentos, aunque no pueden eliminar nuestro estrés, sí influyen de forma positiva en la forma en que nuestro cuerpo lo maneja y además, nos ayudan a relajarnos...

  1. Alimentos ricos en triptófano: aminoácido precursor de la serotonina (el neurotransmisor que ayuda a regular el estado de ánimo). Pavo, pollo, plátanos, nueces y productos lácteos.

  2. Alimentos ricos en magnesio: mineral que relaja los músculos y calma el sistema nervioso. Espinacas, almendras, aguacates, y legumbres.

  3. Alimentos ricos en antioxidantes: nos protegen de los daños por estrés oxidativo y refuerzan nuestro sistema inmunológico. Frutas y verduras coloridas:  como frutos rojos, brócoli, espinacas, zanahorias...

  4. Alimentos ricos en ácidos grasos omega-3: con efectos beneficiosos sobre el cerebro, tienen propiedades antiinflamatorias y ayudan a reducir la ansiedad y la depresión. Pescados azules como el salmón, las sardinas y el atún, así como las semillas de chía y las nueces y almendras.

  5. Té verde: contiene compuestos que pueden ayudar a reducir la ansiedad y promover la relajación.

  6. Chocolate negro: puede ayudar a reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés.

También es recomendable evitar el exceso de cafeína y azúcar, así como limitar el consumo de alimentos procesados, ya que pueden aumentar nuestros niveles de estrés y ansiedad.

En conclusión, una dieta adecuada puede ayudar a reducir los efectos del estrés y mejorar nuestra salud en general, pero es importante que la complementemos con otros hábitos y técnicas de relajación y manejo del estrés. El ejercicio físico regular o la práctica de la meditación también te ayudarán a mejorar tus niveles de estrés e inflamación.