Alimentos antiinflamatorios
Inflamación: principales causas y efectos.
La inflamación es una respuesta natural del cuerpo. Es un mecanismo de defensa que ayuda a proteger y sanar los tejidos dañados. Sin embargo, cuando la inflamación se vuelve crónica, puede tener efectos muy negativos en nuestra salud.
Una de las principales causas de la inflamación crónica es una mala alimentación. Consumir alimentos altos en grasas saturadas, azúcares refinados y alimentos procesados favorece una respuesta inflamatoria en el cuerpo.
También el estrés crónico, la falta de sueño, la falta de ejercicio y el tabaquismo son ejemplos que contribuyen a la inflamación.
Los efectos de la inflamación crónica en nuestro organismo pueden son extensos. (Se dice que la inflamación es la base de todas las enfermedades). Algunos ejemplos son sus repercusiones en el desarrollo de enfermedades crónicas como la diabetes, enfermedades cardíacas, artritis y enfermedades autoinmunes. Incluso tiene efectos nocivos en la salud mental, siendo causa de síntomas como depresión o la ansiedad.
Alimentos antiinflamatorios
Una forma efectiva de reducir la inflamación en nuestro organismo es incorporar alimentos antiinflamatorios en nuestra dieta. Estos alimentos contienen compuestos que ayudan a reducirla y además promueven la salud:
Frutas y verduras: son ricas en antioxidantes y fitonutrientes que combaten la inflamación. Algunas opciones recomendadas son los arándanos, las espinacas, tomates, zanahorias y el brócoli.
Pescado azul: como el salmón, el atún y las sardinas son ricos en ácidos grasos omega-3, que tienen propiedades antiinflamatorias. Se recomienda consumir al menos dos porciones de pescado a la semana.
Frutos secos y semillas: Los frutos secos y semillas como las nueces, las almendras y las semillas de chía también son excelentes fuentes de grasas saludables y antioxidantes.
Aceite de oliva: El aceite de oliva virgen extra es otra fuente de grasas saludables y contiene compuestos antiinflamatorios. Se recomienda utilizarlo como aderezo en ensaladas o para cocinar a baja temperatura.
Especias: Algunas especias como la cúrcuma, el jengibre y el ajo son antiinflamatorias. Puedes incorporarlas en tus comidas para añadir sabor y beneficiarte de sus propiedades.
Recuerda que una alimentación equilibrada y variada es clave para reducir la inflamación en nuestro organismo. Además de incorporar alimentos antiinflamatorios, es importante limitar el consumo de alimentos procesados, grasas saturadas y azúcares refinados.
Conclusión
La inflamación es muy peligrosa porque como no duele, muchas veces ni siquiera sabemos que la padecemos hasta que aparecen efectos colaterales. Lo ideal es evitar que se produzca manteniendo unos hábitos saludables: reduciendo el estrés, practicando deporte moderado de forma habitual, un descanso reparador o cuidando la salud de nuestra microbiota con una alimentación saludable y variada. Como hemos visto, prevenimos y reducimos la inflamación incorporando ciertos alimentos beneficiosos en nuestra dieta...
